Leonardo Da Vinci y los profetas del Renacimiento, publicada en 1919, quiso ser una continuación de Los Grandes Iniciados, la obra maestra de Édouard Schuré, pero pronto tuvo una identidad propia: un magistral paseo a través de una Italia mágica vista por cinco grandes maestros: Leonardo (<«el Rey Mago»), Rafael, Miguel Angel, Antonio Allegri, llamado el Corregio, y Dante, cuya Beatriz es el epítome del eterno femenino.
La visión de sus pinturas y escritos revelan las ideas matrices que dominaron el Renacimiento: la ley de la metamorfosis, el misterio del eterno femenino y la jerarquía de los tres mundos.