Las versiones de Charles Perrault dieron estatus de clásicos a los sencillos cuentos de hadas, y es que gracias a su virtuosa pluma, las historias de Caperucita Roja, La Bella Durmiente, Cenicienta y demás se han transmitido desde el siglo XVII hasta nuestros días. Los cuentos de Perrault se disfrutaron en los salones de Luis XIV tanto como se amaban en las guarderías, y es su ingenio, humor y detalles vivos los que capturan la imaginación de adultos y niños por igual. Transmutan en vívidas fantasías los miedos y conflictos ocultos que afectan a los pequeños: miedo al abandono, o peor, conflictos con hermanos y padres, y las pruebas de crecer.
Además de las historias conocidas por todos, esta edición incluye los cuentos menos célebres del autor: el inquietante relato de la paciente Grisélida, el divertido Los deseos ridículos y la inolvidable historia que se narra en la Piel de asno.